" La Jabonería de Vieytes"

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viernes, 16 de julio de 2010

El Matrimonio Igualitario ya es Ley

¿UNA CUESTION DE CONCIENCIA?...O ESTOY DONDE ESTOY POR CASUALIDAD Y CONVENIENCIA.

(Una reflexión política, frente al voto "de conciencia" negativo del Sr. Senador ¿kirchnerista? Daniel Pérsico a la Ley de Matrimonio Igualitario votada en la madrugada del 15 de julio de 2010, en el Senado Nacional).

No puedo decir, para ser honesta, que el voto negativo del Senador Pérsico, en la madrugada de hoy, me haya sorprendido y menos desilusionado, porque en los corrillos políticos locales ya se había anunciado y justificado de mil maneras (cuestiones de conciencia, encuestas, “la gente no lo quiere”, etc.) desde el entorno del Senador, su voto en contra. Pero no puedo negar el sabor amargo que me deja, como militante activa del Proyecto Nacional (con lo que el mismo implica en la construcción de una sociedad mas justa, madura e igualitaria), que el Senador que representa a este espacio, desde la provincia de San Luís haya votado igual que Rodríguez Saá y Negre de Alonso.

Me da vergüenza tener que reconocer que me gustó el discurso del Senador Sanz de Mendoza (que no es santo de mi devoción, ni mucho menos, obviamente). Vino a mi mente una votación (por la Resolución 125), en el mismo Senado, hace poco mas de un año atrás, cuando un señor, que detenta la Vicepresidencia de la Nación, dio su voto “no positivo”….a esa actitud yo le llamo “la gran Cobos”; la actitud de no tener espaldas para aguantar ser artífice de un cambio, a pesar de lo que diga “la gente” (máxime cuando sabemos que la opinión publica esta teñida de un inconsciente colectivo todavía invadido por el discurso de los medios concentrados y por dogmas religiosos retrógrados); en aquella ocasión el Senador votó a favor del proyecto (a pesar de los aprietes, que llegaron hasta el punto de tener a un grupo de “camperos” en la puerta de su residencia prendiendo fogatas y profiriendo amenazas contra el y su familia, de esto fui testigo ya que vivo muy cerca de allí); en aquella ocasión, personal y públicamente, le expresamos nuestro apoyo.

Anoche no se discutía una cuestión de conciencia, se estaba discutiendo la ampliación de un derecho; se estaba abriendo un camino hacia el progreso como sociedad, como seres humanos, y ahí no hay espacio para medias tintas. Por eso no entiendo el voto de Pérsico; con la 125 se tocaban intereses económicos de los “dueños“ de la tierra; con la ley de medios se tocaban intereses de los “dueños” de la palabra; anoche se tocaron intereses de poder de los que se creen “dueños de la verdad y las conciencias”…..por eso no se trataba de una cuestión de conciencia sino de COHERENCIA, coherencia con un Proyecto de País…¿Qué va a pasar cuando se traten la legalización del aborto o la separación de la Iglesia del Estado? (Porque los debates van a venir, y se van a volver a discutir las conciencias o los derechos, y no me voy a explayar aquí con mi posición en estos temas, mas que diciendo que estoy a favor). La Ley votada anoche, sin perjuicio del peso que tiene la provincianía en la representación de los Senadores, mucho mas fuerte que en Diputados, era una ley de alcance Nacional, implicaba derechos que nada tienen que ver con lo provinciano, por eso no entiendo el voto del Senador; o esta mal asesorado o todavía no entiende cabalmente el proyecto político del cual forma parte. Respeto su posición personal (en función de la cuestión de conciencia), pero no puedo hacerlo políticamente; como dice el dicho “no se puede quedar bien con Dios y con el Diablo”.

No puedo soslayar en este punto el hecho de que el espacio kirchnerista no logra hacer pie, y menos ser bien visto, en San Luís…y ya pasaron casi siete años de gestión de Néstor y Cristina, estamos a las puertas casi de las próximas elecciones y acá, el Proyecto Nacional pareciera recién estar naciendo… ¿Qué hicieron durante casi siete años quienes tenían la responsabilidad de encabezar la construcción del Sector del Proyecto Nacional? Yo opino que “hacer la suya”, en un espacio con el que se encontraron de casualidad, con cierta “cintura política”, pero sin creer realmente en el Proyecto.

Y siguen estando, colgados, como aferrados a un tren, sin estar convencidos del rumbo…..y lo que es peor, ocupan todos los espacios y no dejan subir a nadie; obvio, nadie que les pueda hacer sombra, aunque se juegue la continuidad de un Proyecto, de un Modelo de País.

“Debemos considerarnos privilegiados por la Historia: hoy tenemos que dar la batalla ideológica de todos los tiempos: un país para pocos o un país para todos. Tenemos la oportunidad de continuar la pelea histórica por la redistribución del ingreso y la justicia social.”( Fuente : “La Campora”, nota publicada por Gustavo Cáceres en Facebook)

CECILIA JOFRE IZU, para La Jabonería de Vieytes

Video del cruce entre el Senador Pichetto y la Senadora Negre de Alonso

VERSION TAQUIGRAFICA DEL VOTO Y LOS FUNDAMENTOS DADOS POR EL SENADOR PERSICO

Sr. Presidente (Pampuro). Tiene la palabra el señor senador Pérsico. Sr. Pérsico. Señor presidente: me voy a expresar para adelantar mi voto en contra de la sanción que viene en revisión de la Cámara de Diputados con relación al matrimonio entre personas del mismo sexo. Luego de escuchar muchos discursos, quiero compartir la exposición del señor senador Jenefes, porque me siento bastante identificado con lo que él ha expresado.

Estoy de acuerdo con las minorías, con su cultura, con sus hábitos, con su forma de ser y de pensar. También estoy de acuerdo en la no discriminación, que consiste en aceptar la diversidad. Pero también estoy de acuerdo en que el matrimonio es una institución de nuestra República que siempre, desde la Constitución, el Código Civil y las leyes internacionales, ha respetado la heterosexualidad, o sea, al hombre y a la mujer, como base fundamental de la

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sociedad. Esto no implica –y me parece mal que se así se entienda– que uno discrimine. Las uniones del matrimonio son diferentes a las del mismo sexo; y debe ser aclarado de esa forma. Quiero aprovechar esta exposición, también, para aclarar varias cosas. En estos días, se ha señalado en los medios –yo lo he escuchado– que uno no tenía clara la posición. Sin embargo, desde el primer momento, yo he hablado con distintos sectores del pueblo de San Luis, al cual represento –en su gran mayoría, respeta el matrimonio como la diversidad del hombre y la mujer–, y me he manifestado respetando esa posición. Lo he dicho en todos los medios. Jamás he dicho nada en contrario. Por eso me sorprendió cuando vi algunas publicaciones en medios nacionales. Pero no me voy a poner en contra de éstos ni a discutir al respecto. Y tampoco hubo presiones. Creo que todos los bloques han actuado con madurez y otorgando libertad a cada senador para que exprese sus sentimientos, sus pensamientos y los de su pueblo, a fin de que cada uno vote de acuerdo con sus ideales. Es muy importante dejar esto aclarado, porque he escuchado muchas cosas que no son ciertas. Creo que a nadie de aquí lo han obligado a subirse a un avión ni a nada. Aquí hubo libertad de expresión. Por eso, hice mías las palabras del señor senador Jenefes, porque también me siento bastante incómodo votando un pensamiento distinto del de la mayoría de mis compañeros de bloque. Entiendo su postura y espero que ellos comprendan la mía. Creo que ambas posiciones están muy cerca y, tal vez, un diálogo o un debate podrían permitir, en el futuro, solucionar con una ley este tema. Considero que ha sido muy positivo debatir este asunto, dado que las personas que tienen unión en el mismo sexo deben tener la posibilidad de avanzar sobre una norma que las ampare. Han logrado establecer un debate en la sociedad argentina que siempre fue muy difícil, por problemas culturales e históricos, pero se ha avanzado bastante. Por eso expreso todo mi respeto hacia esos sectores. Pero también, creo –y son mis convicciones familiares, de mi crianza y también educativas– que la familia está formada, por naturaleza, por un hombre y una mujer. La familia está basada en la reproducción de sus hijos. Y creo que nosotros, como legisladores, debemos respetar fuertemente esa cuestión de Estado, en el sentido de reafirmarla. También respetar todo lo demás, pero no podemos dejar de lado muchas cosas. Uno ya no tiene miedo, como político, de escuchar cosas –como decía– extremistas o fundamentalistas. Pero me parece que no son buenas para estos debates. He escuchado de familias violadoras, etcétera, y la verdad es que, en la realidad, hay de todo. En la diversidad, hay de todo. Yo creo que quienes legislamos tenemos que hacer normas para que el ser humano, que es un ser imperfecto, pueda mejorar, cambiar y tener una mejor calidad de vida. Es lamentable que un matrimonio heterosexual abandone a sus hijos o que los niños, a veces, no sean respetados en sus derechos. Pero nosotros, como políticos, tenemos que batallar para que esa realidad mejore y que nuestros niños crezcan con la posibilidad de vivir mejor. Hay una cuestión que no hace a esta norma –yo no sabía si instalarla o no–, como es la adopción, pero creo que está relacionada con la posibilidad de que se apruebe esta iniciativa. Y desde mi punto de vista –lo quiero dejar claro, acá-, la familia, el padre y la madre son generalmente quienes dan la mejor contención a los niños, quienes necesitan de las figuras parentales para identificarse.

Pero, más allá de eso, según la experiencia que uno ha tenido con sus padres, abuelos, con sus hijos, esa simbiosis, ese afecto que se establece entre la madre y su hijo al amamantarlo, al criarlo, al haberlo tenido nueve meses en su vientre –es algo que los hombres

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no podemos sentir–, hace que no haya igualdad en algunas cosas. Son diferentes y las tenemos que tratar así, sin faltarle el respeto a nadie. Creo que esas cosas hay que profundizarlas. Hay que tratar de que todos tengan las mismas posibilidades. Hay muchas madres solteras, muchas separadas; y yo digo que para separase, hay que tener mucha madurez, responsabilidad, igual que para otros temas. Pero sabemos que hay una realidad en el país. Por ahí, no son el mejor mecanismo de contención social de los niños y jóvenes; y eso se puede ver después, en la realidad que vivimos. Por lo expuesto, quiero expresar mi respeto y las disculpas que puedan merecer los compañeros de bloque, que han visto que no los acompaño. Creo que es la primera vez que procedo de este modo. Pero lo hago por mis convicciones, por acompañar a la gran mayoría del pueblo de San Luis, que me ha expresado su posición. También les digo que respeto su postura y que sería muy positivo que, en un futuro, superemos esto. Creo que esto implica un cambio cultural que no se puede hacer en un mes o en un año. Es un cambio cultural que necesita de nosotros un tiempo de maduración. De todos modos, pienso que el debate se ha dado; se ha llevado a todo el país por parte de la Comisión y se ha puesto en la primera página de todos los medios, más allá de que algunos han sido fundamentalistas y me han hecho sentir mal, porque yo digo que, en democracia, tenemos que saber pensar diferente. Y cuando alguien piensa diferente, creo que antes de demonizarlo o asegurar que no es bueno, tenemos que encontrar algún término medio. No sé cuál será el resultado hoy, pero yo estoy expresando mi posición, el deseo de poder armar una iniciativa que contenga y otorgue los derechos que se merecen los matrimonios de personas del mismo sexo. Pero también, estoy manifestando la diferencia entre estos y los matrimonios entre personas que no son del mismo sexo. Me parecen dos cosas totalmente distintas. Eso no implica que uno no les quiera dar afecto; a mí, inclusive, me tocó convivir con ellos; tener amigos con parejas homosexuales, que me parecen brillantes; conocer que hay cosas buenas y malas en los dos sistemas. Pero la Constitución y los tratados internacionales de Derechos Humanos dicen que la familia es la unión del esposo y de la esposa, de la mujer y del hombre; es la base social fundamental y, sin discriminar a nadie, habría que tomarla como núcleo de nuestro Estado, tal como ha sido hasta ahora en la Argentina. Desde esa posición, y respetando las contrarias, pidiendo disculpas al gobierno nacional por no estar de acuerdo en este tema, voy a votar en contra del proyecto que viene de la Cámara de Diputados.-

Aclaración (por cuestiones de espacio no se publica la versión taquigráfica de la sesión)

4 comentarios:

  1. es imposible unificar el espacio con posiciones como estas.... muy bueno el articulo ... menos mal que alguien se anima a decir estas cosas ... San Luis parece Fuente Ovejuna .... todos saben del crimen pero nadie dice nada .....

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  2. Me parece que Pérsico cayó en una contradicción: si acepta la evolución de la sociedad, cómo es que no legisla para dar lugar a estos cambios

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  3. COINCIDO PLENAMENTE CON EL ARTICULO. FELICITACIONES!!!
    MARTA FUNES

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  4. EL DIA QUE APRENDAMOS A ACEPTAR QUE NO TODOS DEBEMOS PENSAR IGUAL, Y QUE LOS QUE PIENSAN DISTINTO SON NUESTROS ENEMIGOS Y HAY QUE DEMONIZARLOS, ESE DÍA PODREMOS HABLAR REALMENTE DE EVOLUCIÓN Y DE VERDADERA TOLERANCIA. YO ESTOY CON ESTE PROYECTO NACIONAL, LO APOYE DESDE ANTES DE QUE SE PUSIERA EN PRÁCTICA PERO ESO NO SIGNIFICA QUE APRUEBE TODO LO QUE PROPONE DE UN MODO ABSOLUTO, CLARO ACEPTO DE UN MODO ABSOLUTO QUE CUANDO LA MAYORÍA GANA, LAS MINORÍAS DEBEN SOMETERSE A ESA VOLUNTAD SUPREMA, NO POR ELLO DEJO DE EXPRESAR MI PENSAMIENTO, EL DÍA QUE DEJE DE PENSAR POR MI MISMA, ME HABRÉ CONVERTIDO EN UNA AUTÓMATA..EL PODER EXPRESARSE LIBREMENTE, ES UNA DE LAS GRANDES CONQUISTAS DEL SER HUMANO, SI ASÍ NO LO ENTENDEMOS NO PODREMOS HABLAR JAMAS DE TOLERANCIA, DE DIVERSIDAD Y LO QUE ES PEOR AÚN JAMÁS PODREMOS HACER LA DIFERENCIA, EL DISCURSO DEBE SER COHERENTE CON LA PRÁCTICA, PARA ELLO TOMEMOS EJEMPLO DE NUETRA QUERIDA PRESIDENTA, HOY ELLA GOBIERNA PARA EL QUE LA APOYA Y TAMBIÉN PARA LOS QUE NO...ES LO QUE MÁS ADMIRO ENTRE TANTAS OTRAS CUALIDADES DE ESTA GRAN MUJER.APRENDAMOS HERMANOS, LA HISTORIA NO ESPERA!!

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